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El
fantasma de Lucentum Equipo Sirius es una
pequeña editorial fundada en 1985 y especializada en libros de divulgación
científica y literatura de ciencia ficción. Editor de Tribuna de Astronomía y Universo, publicación decana dedicada a
las ciencias del espacio, en los últimos años ha multiplicado y diversificado
sus colecciones de ficción para tocar varios géneros: ciencia ficción, fantasía,
terror, novela histórica… a través de sus colecciones Transversal, y
posteriormente con la revista Galaxia,
sucesora de la efímera 2001. Y lo
más interesante de todo ello es que, salvo excepción, todo ese material
publicado corresponde a autores hispanoparlantes.
Con labor paciente, ha logrado incluir en su catálogo autores conocidos por
sus aportaciones en el campo científico junto a algunos de los grandes
nombres de la ciencia ficción: Miquel Barceló, Carlos Gardini, Ian Watson… y Gerardo Muñoz, reeditando la obra de
este polifacético autor, ahora en su segunda entrega tras el clásico menor La plica de Balbino
el viejo. Miguel Bustamante, psicólogo jubilado y viudo, se
traslada a Alicante en busca de tranquilidad y un clima más benigno para sus achaques.
Esa noche es despertado por un fuerte estruendo en el apartamento vecino, que
a la mañana siguiente se revela como escenario de un asesinato perpetrado en
extrañas circunstancias. Ocioso e intrigado por las palabras del conserje
sobre una aparición fantasmal que ha provocado ya otras víctimas, decide
tomar cartas en el asunto y colaborar con la policía en el esclarecimiento
del caso. Cuando esa noche, en duermevela, vislumbre en su terraza una figura
oscura de rostro embozado, ojos ardientes y manos como garras, su
participación circunstancial se tornará en asunto personal. Muñoz, escritor veterano, estructura esta historia arquetípica y previsible
en nueve capítulos, tantos como días se alarga la pesadilla en la urbanización
Parque Celeste. Utiliza un lenguaje campechano, quizá algo anticuado y
despojado de florituras estilísticas que entorpezcan el discurso. Sus
personajes encarnan a la perfección la particular idiosincrasia mediterránea,
aunque los secundarios debieran estar mejor perfilados (indefectiblemente,
siempre son presentados con una escueta descripción física a la que no se
retorna). Las descripciones suelen demorarse en triviales detalles
existenciales que, si bien dotan a los protagonistas de realismo y
cotidianidad, ralentizan un texto lastrado por innumerables acotaciones
separadas por comas que entorpecen el orden natural de la narración. No
obstante, mantiene un buen ritmo gracias a escenas ágiles y abundante
diálogo, especialmente entre gentes sencillas. Los momentos de tensión se ven
venir pero consiguen los resultados esperados gracias a su oficio. Al margen del evidente coqueteo con el horror
sobrenatural, el maduro protagonista concede un crédito racionalista a los
sucesos paranormales que acompañan las apariciones del misterioso ser
(elemento que también se repite en La
plica de Balbino el viejo, y nos induce pensar
que es compartido por el autor, al igual que otros narradores clásicos de
terror). Al final, el elemento fantástico se trastoca en algo radicalmente
diferente de lo que a priori apuntaba la historia, ahondando en la crónica
negra de España con explicación paracientífica y
moralista incluida. Salvando alguna que otra incongruencia menor (como
la existencia de cabos y soldados entre los miembros de la policía nacional,
escuchar un único estruendo cuando la víctima es golpeada contra el techo –se
supone que posteriormente caerá al suelo-, o un Grupo de Patrullas Rurales de
acrónimo “go” por GEO), Muñoz demuestra que
es un escritor con tablas que sabe desarrollar una historia. En este caso,
utiliza como fondo la rutina de trabajo policial y procedimientos
medico-forenses, aunque desaprovecha como escenario los restos históricos de
su ciudad de adopción (Alicante, antigua Lucentum). Una lectura agradable y sin complicaciones. Un
libro de diseño original y diferenciador, aunque la portada e ilustraciones
interiores de Manuel Calderón sean demasiado explícitas y dadas al
histrionismo pulp. Valoración:
6 |
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