Una ucronía cuyo punto de ruptura se sitúa en el año 1492 en la que el cometa C/1490 Y1 en vez de limitarse a ser el cuerpo celeste que ha pasado más cerca de la Tierra en tiempos históricos se precipita sobre la Antártida. El impacto provoca la fusión de los polos, el aumento de los niveles de dióxido de carbono y una subida en el nivel del mar de cien metros. La catástrofe causa la desaparición de naciones localizadas en tierras bajas y el auge de otras, movimientos de población y cambios geográficos importantes. España es una de las naciones menos perjudicadas y se beneficia de los movimientos de población lo que permite a la casa de Trastámara expandirse por el Norte de África. Al cabo de cien años de la catástrofe, en los albores del siglo XVII España y el Imperio Otomano se disputan el dominio del Mediterráneo como si nada hubiese cambiado. ¿Nada? Las rutas de las especias pasan ahora por el estrecho de Suez y Tierra Santa adquiere un mayor valor estratégico...