Portal Literatura Fantástica

Libros publicados en 2010

Santuario de buitres

Información de contraportada:

Red Ghallinan, Buck Laramie, Bill McClanahan y Steve Corcoran —¿acaso cuatro seudónimos de un mismo lobo solitario?— son los protagonistas —evito deliberadamente el calificativo de «héroe»— de este volumen de historias del Oeste del autor texano Robert E. Howard (1906-1936). Los cuatro se someten a un mismo código: «El rígido y grabado a fuego código de la frontera de Texas». Los cuatro mantienen equívocas relaciones con el sexo opuesto: «Para los tipos de su pasta el honor, la vida y el cuerpo de una mujer son intocables», y sus sentimientos hacia ella se parecen a los del hombre corriente en la medida que lo permiten sus naturalezas de hierro. Los cuatro se ven atrapados en una tupida red de pistolerismo y corrupción financiera y policial que amenaza su honor, sus intereses sentimentales y/o pecuniarios y las vidas y haciendas de ciudadanos inocentes: Los Laramies, los Buitres de Wahpeton, la banda de El Dorado… villanos y gangs cortados por el patrón de Hendry Brown y la banda de Los Inocentes de Henry Plummer, pero que recuerdan a los matones de Al «Scarface» Capone o Charles «Lucky» Luciano. Otra cosa comparte este «cuarteto del plomo fácil»: las frases como epitafios que disparan son tan letales como el plomo de sus revólveres... En «Navidad, dorada esperanza» descubrimos que hasta los más duros e implacables pistoleros tienen su corazoncito... En »Ajuste de cuentas en Boot Hill», Buck Laramie, que regresa a San León para purificarse de las culpas de sus cuatro descarriados hermanos, deberá enfrentarse a unos nuevos forajidos que cometen sus fechorías siguiendo la estela de sus hermanos muertos... En «Santuario de buitres», la banda de El Bravo captura a una joven e inocente pionera; su única posibilidad de escapar es un hombre al que odia, el irascible vaquero Gran Mac... En la novela corta Los Buitres de Wahpeton (una de las mejores historias escritas por REH y sin duda su mejor western), Steve Corcoran, un pistolero texano, encuentra trabajo como alguacil de una populosa ciudad minera... pronto descubrirá que no es oro todo lo que reluce. Si les sirve de algo la opinión de este humilde traductor, cuando consigo algo de dinero compro libros de Howard; si sobra algo, comida y ropa.

 

Noveno volumen de la obra completa (?) de Robert E. Howard en nuestro sello editorial. Siempre empezamos con la variante correspondiente de la primera frase, pero es que necesitamos recordar de vez en cuando que lo que hacemos con la obra de Robert E. Howard es una tarea que nosotros mismos (a falta de abuela) reconocemos como meritoria. Puede que no siempre acertemos en la elección de los temas elegidos, pero en este caso, en este libro concreto, creo que saldamos una deuda casi de sangre con los lectores del texano. Muy pocas veces fuera de Estados Unidos se han publicado sus relatos del Oeste y, como ya dijimos hace muy poco tiempo, cumplimos hoy una promesa y sacamos un volumen de novelas del Oeste, del más puro Oeste. No hablamos de superhéroes estilo tebeo de la Marvel, sino de verdaderos luchadores del más duro y salvaje western. Héroes denodados que luchan más allá de sus fuerzas en unos decorados que no dejan de recordar los que ya conocemos por las historias de El Borak, otro pistolero, éste de El Paso, fugado a los desiertos afganos. Aquí nos vamos a encontrar con aventuras no tocadas ni por Roy Thomas ni por Sprague de Camp, mucho menos por Lin Carter, pero unas aventuras donde la sangre corre a borbotones y la sombra de Gerónimo, Chato y tantos otros aparece por el borde la página. Llegó la hora del tiroteo.

Volver a Literatura Fantástica

eXTReMe Tracker ¡CSS Válido! Valid HTML 4.01 Transitional Icono de conformidad con el Nivel Doble-A, de las Directrices de Accesibilidad para el Contenido Web 1.0 del W3C-WAI