Naturaleza muerta
-Texto de contraportada-
Para Claudia el divorcio fue el primer paso hacia una nueva vida. El segundo ha sido mudarse a una pequeña alquería en la ladera de un pantano valenciano. Allí solo pretende vivir tranquilamente: olvidarse del mundo, trabajar lo mínimo posible, cuidar el huerto y dejar, por fin, la larga lista de fármacos que tomaba para calmar el dolor físico y mental que le produjo el matrimonio. Es un plan sin fisuras… Hasta que descubre que en la noche del pantano las luces más preciosas tienen los orígenes más oscuros.