Valoración en breve:
El rumor de los huesos es una inquietante novela gótica, un adictivo relato repleto de antiguos secretos familiares, oscuros misterios, magia, brujas y criaturas salidas de los mitos y de los mares. Pero, sobre todo, es una fascinante historia posmoderna de empoderamiento de una mujer joven que lucha contra los designios de una sociedad patriarcal que pretende dominarla.
Una historia que tiene algo de cuento de los hermanos Grimm y cuya trama de misterio, supervivencia y justicia atrapa desde la primera página. Además, ofrece algunos giros argumentales absolutamente colosales. Sin duda, una de las grandes sorpresas del año
El rumor de los huesos
-Argumento-
Los O’Malley son una orgullosa familia de rancio abolengo asentada en Edén del Trasgo, un antiguo caserón próximo a los acantilados lleno de polvo acumulado por el paso del tiempo. Son una estirpe de navegantes que se enriquecieron con el comercio –dicen que gracias a un pacto con el mar: seguridad para sus barcos a cambio de ofrendar un hijo de cada generación–, pero su dinero y poder se agotaron tras años de malas inversiones, cargamentos hundidos y cosechas perdidas, acumularon grandes deudas y el linaje decayó. Ahora solo sobreviven los tres últimos miembros del clan.
Miren O’Malley es la única heredera, criada junto a sus austeros y autoritarios abuelos cuando de niña quedó huérfana; o, al menos, eso es lo que siempre le han contado. Cuando el viejo cabeza de familia fallece, su esposa Aoife planea utilizarla para intentar recuperar el antiguo esplendor familiar, pero la muchacha se niega a desposarse con su odiado primo y se embarca en un peligroso viaje a través de un territorio desconocido con el fin de descubrir el misterio que envuelve la desaparición de sus padres y, de paso, desvelar el oscuro secreto que arrastran sus antepasados.
-Valoración-
Angela Slatter (aka A.G. Slatter) es una escritora australiana de ficción especulativa, autora de varias novelas negras de tintes sobrenaturales –Vigil, Corpselight, Restoration– un puñado de novelas cortas –Ripper, The Bone Lantern– y una decena de libros de relatos, solo dos traducidos al español: Masa madre y otros relatos y De conjuros y otras penas, si bien podemos encontrar otras colaboraciones suyas en la revista SuperSónic #7 y en la antología colectiva Dark Fantasies –«La hija del fabricante de ataúdes», premio British Fantasy 2012, un relato con el sabor de los clásicos de terror y un atractivo enfoque sensual– que tuve el placer de seleccionar hace ya algunos años. Una autora que ha ganado numerosos premios internacionales, entre ellos el World Fantasy, British Fantasy, Ditmar, Australian Shadows y Aurealis en seis ocasiones.
El rumor de los huesos es una inquietante novela gótica, un adictivo relato repleto de antiguos secretos familiares, oscuros misterios, magia, brujas y criaturas salidas de los mitos y de los mares. Pero, sobre todo, es una fascinante historia posmoderna de empoderamiento de una mujer joven que lucha contra los designios de una sociedad patriarcal que pretende dominarla.
Miren es la protagonista absoluta de la novela, una muchacha inteligente, independiente y bastante cerebral, que sabe controlar muy bien sus emociones y esperar el momento oportuno para llevar a cabo sus planes. Sin lugar a dudas, es una mujer de recursos y demuestra sangre fría cuando es necesario –sus abuelos le proporcionaron una brutal educación emocional–, pero está sola y deberá tomar decisiones trascendentes en su vida sin el apoyo de prácticamente nadie más. Al contrario que las sumisas damiselas de los dramas decimonónicos, no se deja arrastrar por las circunstancias, sino que decide tomar partido en favor de sus propios intereses.
No es este el único personaje perfectamente retratado, pues protagonistas y secundarios, todos ellos dotados de una fuerte personalidad, parecen cobrar vida gracias a la maestría de esta veterana escritora: su temperamental abuela Aoife, una mujer terrible y obstinada, que no soporta la idea de que nadie desafíe su autoridad; el egoísta y manipulador primo Aidan, con la riqueza y poder suficientes como para salirse siempre con la suya; los viejos criados de la mansión; su enemistada prima de la ciudad; o su abuelo, personaje en la sombra, tan querido como odiado pues, pese a su mal carácter y redomada mezquindad, le enseñó todo lo que sabe sobre el mar, el comercio, los mitos y supersticiones. Por citar solo algunos entre los muchos actores que aparecen a lo largo del texto y que no conviene desvelar.
Slatter describe una sociedad preindustrial en donde la magia, en teoría, ha desaparecido; al menos, eso es lo que predica la todopoderosa Iglesia, a la que la que Miren y los suyos llaman «perros de Dios». Sin embargo, como luego comprobaremos, aún subsiste en forma de discretos hechizos por parte de algunas astutas mujeres o como fantasmas, aparecidos (marinos ahogados que despiertan a una no vida), licántropos, troles y trasgos en algunos apartados rincones de bosques, montañas, caminos, lagos y espejos.
Precisamente Miren atesora un desgastado libro de cuentos propiedad de la familia, con el que creció escuchando historias del mar y de los fabulosos habitantes de las aguas: sirenas, ninfas, nereidas, nixes, selkies (mujeres-foca), rusalkas (doncellas asesinadas o suicidas a causa de desdichas por amor), etc.; en general, criaturas femeninas de cariz vengativo que se relacionan esporádicamente con el mundo de los hombres. Gracias a estos cuentos(1) la protagonista empieza a intuir que existe un poso de verdad en ellos y eso la ayuda en su particular cruzada en busca de sus ancestros: «Los cuentos forman parte de la historia, sean ciertos o no» se indica en un cierto momento.
A lo largo de las páginas de este libro la autora australiana va desgranando más y más detalles que enriquecen la complejidad y la tridimensionalidad de este universo de ficción, relacionados con la decadencia de los O’Malley, sus vínculos con el mar, las normas sociales que rigen el código de conducta de la alta burguesía, descripciones de los abruptos alrededores de Edén del Trasgo y del lóbrego caserón, elementos de vestuario y un largo etcétera. En ellos Slatter hace gala de un estilo depurado y elegante, al que se suma una voz narrativa en primera persona que nos hace empatizar fuerte y rápidamente con el azaroso destino de nuestra protagonista.
El rumor de los huesos es una fantasía gótica con todas las características propias del género –una atmósfera oscura y decadente, una estética romántica repleta de lugares tenebrosos, conspiraciones familiares, preocupación por el linaje, un ominoso secreto del pasado, monstruos, villanos, etc.– protagonizada, eso sí, por una mujer con una visión moderna e independiente del mundo y con un desenlace redondo en el que todo encaja a la perfección, si bien deja al lector inteligente unir por su cuenta algunos cabos.
Una historia que tiene algo de cuento de los hermanos Grimm y cuya trama de misterio, supervivencia y justicia atrapa desde la primera página. Además, ofrece algunos giros argumentales absolutamente colosales. Sin duda, una de las grandes sorpresas del año.
(1) Algunos de estos cuentos aparecen en forma de relatos en las antologías Masa madre y The Bitterwood Bible.
